Tener alternativas frente a los altos costos de la energía eléctrica y calorífica, anular la emisión de gas en las casas, mejorar la dosificación de los consumos diarios (consumo energético responsable) , aportar en la disminución de la huella de carbono (descarbonización) y a la evolución de la matriz energética chilena, de carburos a una más verde.